Se ofrecerá un apoyo integral mediante un modelo "personalizado" a las empresas de titularidad estatal que se trasladen a Shenzhen, o a grandes empresas que se trasladen a Shenzhen y logren los estándares para ser calificadas como "empresa con sede central".

Shenzhen ofrece un subsidio de 10 millones de yuanes a las empresas con sede social recién implantadas que prometan generar valor de producción y pagar impuestos a la administración local según lo exigido dentro de un plazo determinado.